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Revista ECA Sinergia
ISSN-e: 2528-7869
https://www.revistas.utm.edu.ec/index.php/ECASinergia
Vol. 14 Núm. 3 (129-141) Septiembre-Diciembre 2023
revistaecasinergia@gmail.com
Universidad Técnica de Manabí
DOI: https://doi.org/10.33936/ecasinergia.v14i3.5665
nivel micro como macro. Ya sea que se requiera que los trabajadores aprendan nuevas habilidades, reasignar responsabilidades y
prioridades o invertir en nuevas herramientas o softwares. El proceso de gestión del cambio implica un enfoque de arriba hacia abajo
para gestionar el cambio (Bridges, 2018). (Texeira et al., 2020), sostienen que la orquestación de recursos garantiza la implementación
coordinada de acciones operativas y estratégicas en un proceso de recuperación.
En muchas organizaciones, hay una devaluación del análisis estratégico y sobrevaloración de la eciencia operativa. Es difícil
conciliar el día a día y el futuro, porque este último no es la suma de varios días. Cuando los problemas operativos no dejan tiempo
para preocupaciones estratégicas, las consecuencias pueden llevar al cierre de la empresa. “Cabría preguntarse si un entorno de
crecimiento o de recesión económica impacta sobre las diferencias de desempeño entre la diversicación, y si lo hace en igual
medida para todo tipo de empresas, por ejemplo, según su tamaño”. (López Zapata y García Muiña, 2019, pág. 21)
Existen situaciones que pueden provocar una emergencia, por ejemplo: acciones de la competencia; cambios en las preferencias de
los clientes; avances o cambios tecnológicos; problemas sociales; políticos; económicos; conictos entre países; guerras, etc. Sin
embargo, algunos cambios tienen consecuencias catastrócas, como los desastres naturales; incendios; terremotos; inundaciones;
cambio climático; pandemias; entre otros. La situación desde inicios de 2020, relacionada con la pandemia COVID-19, afectó
diferentes sectores, precisamente porque puso en riesgo la continuidad de negocios, sin embargo, es importante reconocer que el
efecto en el sector textil fue indirecto, debido a las restricciones de distanciamiento y movilidad, entre otras. (Torres Preciado, 2020)
El Sector Textil
Para la sociedad moderna, el deseo de mejores prendas de vestir dio como resultado el desarrollo de producción de bras textiles y
fabricación de nuevas alternativas (Lewin, 2017), como bras textiles naturales por su comodidad y estética. El algodón, la lana y
seda son bras naturales importantes para prendas de vestir, en especial el algodón por sus propiedades sobresalientes y uso versátil
(Mohan, 2019), sin embargo, al momento de poner atención a la producción de textiles y más aún si se busca sustentabilidad,
necesariamente nos referimos a disminución del impacto ambiental. (Ramírez y Rubio, 2022), estudian los efectos adversos y
contaminantes de colorantes utilizados en textiles, y presentan el bio-carbón como alternativa, la cual se alinea a iniciativas de
Economía Circular.
La bra de algodón cultivada con propiedades ecológicas u orgánicas, no utiliza productos químicos sintéticos, pesticidas,
fertilizantes, etc, se produce a través de cultivo ecológico. Turquía, Estados Unidos e India son principales países productores
de algodón orgánico. (Hossain, 2020). La cantidad de productos textiles, demandados por la moda, representa más del 65% del
mercado, Grand View Research indicó que la moda, textiles técnicos y el hogar son los tres principales sectores del mercado mundial
(Uddin & Lomas, 2019). Se espera una tasa de crecimiento anual del 4,25% durante 2018-2025 en el mercado textil mundial, se
estimó USD 925,3 mil millones en 2018, por lo cual se esperaba un crecimiento signicativo en años posteriores, China e India
seguirán siendo líderes en este crecimiento. El aumento de la población urbana y el poder adquisitivo es el principal motor para el
consumo de prendas de vestir. Los procesos textiles abarcan desde la fabricación de hilos hasta la costura de prendas, estampado de
telas y producción de compuestos, sin embargo, considerando la bra textil como unidad básica de construcción del producto textil,
su fabricación puede identicarse claramente como textiles convencionales y técnicos (Wakelyn, 2020).
Las etapas en la fabricación de textiles, desde la producción de bra hasta el tejido terminado, están experimentando mejora en
el control y evaluación del proceso. Incluye producción y procesamiento de bra textil a través de apertura, cardado, estirado y
peinado; y producción de telas, incluidos tejidos de punto, coloración, acabado, y la fabricación de prendas de vestir (Parker, 2020).
Según (Swain y Yang-Wallentin, 2019) el concepto de sostenibilidad está inmerso en un proceso que obtiene mejores indicadores
con menos recursos. En este contexto, los procesos deben apoyar el desarrollo sustentable, garantizando las necesidades básicas
de la población, mediante el manejo racional de recursos naturales, sin comprometer la sustentabilidad de sociedades futuras. Los
procesos industriales se consideran sostenibles cuando son innovadores e involucran seguridad y gestión de residuos (Xia & Zhang,
2019). Por tanto, una sociedad será sostenible si garantiza la vida de la población y los ecosistemas. (Yao y otros, 2020).
En el proceso global, es necesario el cambio de una sociedad de consumo a una sociedad sostenible centrada en el bienestar del
planeta para generaciones futuras. Esto puede lograrse con el respeto a límites biofísicos y reducción de explotación de recursos,
además fomentar la justicia social desde el consumo per cápita (Jacobides & Kudina, 2013). Las iniciativas deben crear conciencia
sobre la creación de una sociedad más sostenible que abarque Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) (Lee, 2019). Una sociedad
sostenible proporciona mayor nivel de bienestar medioambiental, social y económica.