
78
Revista ECA Sinergia
ISSN-e: 2528-7869
https://www.revistas.utm.edu.ec/index.php/ECASinergia
Vol. 14 Núm. 1 (76-86) Enero-Abril 2023
revistaecasinergia@gmail.com
Universidad Técnica de Manabí
DOI: https://doi.org/10.33936/ecasinergia.v14i1.3585
INTRODUCCIÓN
El presupuesto público es el medio por el cual el Estado espera la buena intermediación en el abastecimiento de servicios de calidad,
ecientes y esforzados. Se debe tratar de mejorar las posibilidades. Estas actividades ayudan a las personas a alcanzar la prosperidad
y reducir la pobreza, contribuyendo al desarrollo de los ciudadanos. Por tanto, los presupuestos se preparan sobre la base de las
normas presupuestarias, las restricciones económicas y nancieras establecidas por todo Estado, así como los cálculos de diversas
variables y parámetros económicos en la población, las variaciones en las autogestiones (petróleo, inación e impuestos, etc.). La
composición de los gastos reeja los objetivos de la política de todo gobierno en respuesta a sus funciones básicas de asignación de
recursos, distribución del ingreso y estabilidad económica, que a menudo se denen en los planes de desarrollo que se presentan para
la mejora económica de la sociedad (Melo et ál., 2022). La perspectiva de la entidad gubernamental de la zona rural está ligada al
desarrollo de la población, por lo cual, se considera que la alternativa más óptima, es que se genere nuevas fuentes nanciamientos
mediante la prestación de sus servicios. El mismo que nace del presupuesto asignado por las fuentes de nanciamiento de todo país.
Según Pinedo et ál., (2021), “el proceso presupuestario no cuenta con los mecanismos necesarios para cumple con los deseos de la
población y lo expresado en el plan de desarrollo, y es común encontrar que un presupuesto de Estado completamente ejecutado
no logra las metas establecidas en el plan.” (p. 13527). De igual forma, Arciniegas y Carlosama (2019) nivelaron que, el problema
de los GADs es que no cuentan con los capitales sucientes para cubrir todas las necesidades de la comunidad y la sociedad, por lo
que el análisis de los informes anuales y la evaluación de los resultados del presupuesto 2017 y 2018 reejaron las falencias en la
ejecución del proyecto.
Por consiguiente, lo más importante en la administración pública es que “el engranaje estratégico funcione proporcionalmente, ya
que así, la localidad se vuelve más competitiva en calidad de vida, con servicios públicos modernos y ecientes” (Vegas-Meléndez,
2017, p. 12). Es preciso decir que, los GADs están comprometidos en el desarrollo social de un país pese a que se enfrenten las
limitaciones del presupuesto asignado por el Estado. Por tanto, el ejercicio de la gestión de recursos gubernamentales es incierto ante
la solución de problemas que presenta la población.
En el caso de Ecuador, el presupuesto público circula basado en la autogestión, involucra en todo los ámbitos al funcionario público,
puesto que, la Constitución de la República de Ecuador (2008), en la sección segunda de Administración Pública en el artículo 227
sustenta, “la Administración Pública es un servicio a la colectividad que se rige por los principios de ecacia, eciencia, calidad,
jerarquía, desconcentración, descentralización, coordinación, participación, planicación, transparencia y evaluación”, que respalda
el funcionamiento público y sostenimiento del uso eciente del presupuesto que benecia a la población.
De igual manera, la Constitución en el capítulo V de los recursos económicos, Art.- 270 expresa que “los gobiernos autónomos
descentralizados generarán sus propios recursos nancieros y participarán de las rentas del Estado, de conformidad con los
principios de subsidiariedad, solidaridad y equidad”. Así mismo, el Código Orgánico de Organización Territorial, Autonomía y
Descentralización (COOTAD, 2010) en su Art.- 2, objetivo, letra b) “la profundización del proceso de autonomías y descentralización
del Estado, con el n de promover el desarrollo equitativo, solidario y sustentable del territorio, la integración y participación
ciudadana, así como el desarrollo social y económico de la población”. Por tanto, es preciso indicar que su función o existencia
radica en mejorar la estabilidad de la sociedad y, que su ejecución nace del presupuesto público, es decir, la administración pública
dentro del territorio involucra a la sociedad, sus necesidades y la autonomía que tiene la entidad gubernamental para ejecutar sus
recursos frente al problema social.
Prácticamente, el presupuesto público de las entidades gubernamentales del área rural, es nanciado en gran medida por la Banca
Central, ya que, su nalidad como es facilitar el proceso de inversión social y económica de un área, por ende, al fuente de
nanciamiento solventa la ejecución de los proyectos como principios de autogestión, aunque siga siendo insuciente, “gestiona
los ingresos, gastos y nanciamientos de estos rubros, dependiendo de la operatividad de los sectores que administra el Estado”
(Álvarez-Sanango et ál., 2020, p. 190). En la misma línea, Rodríguez-Medina et ál., (2005), “los presupuestos son los fundamentos
en que se sustenta la gestión presupuestaria para la toma de decisiones acertadas” ¿(p. 108). Pues, “todo presupuesto, está vinculado
a la cantidad de recursos económicos que se estiman necesarios para hacer frente a cualquier gasto” (Sánchez-Agila et ál., 2019, p.
33). En conclusión, el presupuesto público inuye en toda ejecución nanciera para producir una estabilidad económica social en
las entidades públicas, fuente que desde su línea se ha trasformado en una disyuntiva llamada “escaso o insuciente”.